noviembre 30, 2008

Recetas para bebés de 4 a 6 meses

Por lo pronto he aquí algunas recetas que he encontrado y que deseo compartir:

Puré de vegetales


Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de cocción: 15 minutos
Ingredientes: 1 / 2 libras de zanahorias (o de cualquier otra legumbre de raíz: calabacita, camote, o chirivía)

Indicaciones:
• Cortar las zanahorias en trozos pequeños. Coloque en vaporizador sobre agua hirviendo y ponga a cocer durante 15 minutos (hasta que estén tiernas).
• Mezcle la zanahoria utilizando un poco del agua en la olla para hacer un puré. Servir tibio.
• NOTA: Utilice el mismo proceso para hacer puré de manzana (10 minutos al vapor) o de pera (5 minutos al vapor).
• Rinde 8 porciones.

Compota de pera y manzana

(Para bebés de más de 3 meses)

Ingredientes
100 gr de pera de agua
100 gr de manzana


Preparación
Cocer las frutas, mezclar bien y pasar por la licuadora.

Papilla de frutas

Ingredientes
100 gr de manzana
75 gr de pera
100 gr de pulpa de naranja
75 gr de plátano

Preparación
Lava bien cada fruta y pélalas. Trocea cada una sacando el corazón o las partes que estén dañadas. Pasa las frutas por la batidora, hasta obtener una papilla cremosa.

Sopa de zanahorias, cebolla y arvejas

Receta para bebés a partir de 4 meses

Rinde 4 porciones
• 200 gramos de arvejas picadas.
• 2 zanahorias picadas en rodajas
• 1 cebolla blanca chica picada (la roja tiene sabor y olor más intenso)
• 2 ramitas de perejil
• 1 litro de agua
Colocar el agua en una olla junto con todos los vegetales y hervirlos a fuego lento durante 45 minutos. Luego colar el caldo en un colador colocando una gasa para que los restos pequeñitos de vegetales no pasen al caldo.
Si desea engrosar la consistencia de la sopa, puede agregarle harina de arroz.
Cuando el bebé esté más grande puede procesar los vegetales y hacer una papilla.

Puede separar la parte que consumirá el bebé y el resto congelarlo en porciones separadas.

Compota de frutas

Para preparar las compotas para los bebés de preferencia no se le debe agregar azúcar en la preparación; cómo podemos lograrlo, pues utilizando frutas de estación maduras que cuentan con la dulzura necesaria para esta deliciosa compota que también puede consumir toda la familia.

Una compota de manzanas es ideal para iniciar la alimentación sólida del bebé, además de sus propiedades nutritivas es un excelente digestivo, elimina las toxinas del hígado, favorece la actividad intelectual, fósforo, potasio, vitaminas del complejo B, vitamina E y C

• 1 manzana
• ½ litro de agua aproximadamente
• 1 raja de canela para aromatizar

Corta la manzana en 6 partes iguales (gajos), quítale la parte central de las semillas y colócalas con su cáscara en una ollita con agua hasta que las cubra (aproximadamente ½ litro). De ser necesario agregar más agua
Déjalas en el fuego hasta que se pongan tiernas, luego retíralas del fuego, las manzanas estarán cocidas pero firmes, por lo que podrás desprender fácilmente la cáscara de la pulpa.

La pulpa debes pasarla por el procesador con la ayuda del líquido de cocción para lograr la textura adecuada para el bebé, mientras más pequeño el bebé deberás mantenerla más tiempo en el procesador, a manera que tu hijo vaya creciendo podrá tener una textura menos pareja hasta que puedas hacerla simplemente aplastando la pulpa con un tenedor.

Alimentación para bebés de 4 a 6 meses

Bueno, una de las dudas que me asaltaban al a comienzo era la alimentación de mi beba. A partir de cuando darle otra cosa a parte de la leche ya que varias personas conocidas me comentan que les daban a sus bebés a partir del 4º mes incluso 3º mes, papillas, compotas, juguitos que se les extraía de las frutas acuosas con el fin de experimentar sabores, a parte del valor nutricional, aunque siempre es recomendable consultar con el pediatra pues se corre el riesgo de que el bebé pueda experimentar alergia a ciertos alimentos, por lo que muchos recomiendan comenzar a partir del sexto mes.


En vista de la experiencia de otras madres y que ya veo que mi nena gracias al sentido del olfato, se saborea con el olor de ciertas frutas, me vi un día con ganas de darle agüita extraída de la sandía y le encantó, otro día le extraje con un colador el jugo de la granadilla y también le gustó muchísimo; por eso me di a la tarea una vez cumplidos los 4 meses, de buscar información de recetas aptas para bebés de 4 meses y encontré algunas que según mi opinión, serían muy buenas para la merienda de las tardes.

En un sitio web encontré una recomendación que me pareció interesante y consiste en darle al bebé un vegetal o fruta por unos días y luego ir cambiando de vegetal o fruta, para que en el caso que el bebé tenga alguna reacción alérgica, sea fácil identificar cuál es el alimento que se la desencadenó. Posteriormente, se le podrá mezclar vegetales o frutas y hacer purés variados.

Sólo necesitará la pulpa del vegetal o fruta elegida; para los purés de vegetales agregar aceite vegetal o mantequilla antes de servir y para los purés de frutas agregar leche materna o de fórmula.

Algo que me pareció igualmente interesante es la opinión de un pediatra que una vez vi en un programa y recomendaba que se le introdujera primero los vegetales dentro de la alimentación del bebé antes que las frutas ya que de esta manera el bebé podría adquirir un gusto por los vegetales
y así evitar que los llegue a rechazar a futuro.

La verdad es que esta etapa me parece toda una aventura para las dos y me encanta ser
partícipe cada vez más en cuanto a la alimentación de mi nena, ver como desarrolla el gusto por ciertos alimentos y como le ayudo desde el inicio de su vida a que adquiera hábitos sanos de alimentación lo cual es muy importante si vemos cuanta comida chatarra y llena de químicos existe para nuestros niños en el mercado.

noviembre 22, 2008

Afrontando el cambio

He permanecido alejada de la blogosfera por que en realidad no me he sentido de muy buen ánimo para escribir. Incluso sentía dudas de escribir al respecto, pero creo que esto podría ayudar a más de una que tal vez atraviese por una situación similar.


Mi bebé es lo máximo y una sonrisita, una mirada, un balbuceo o tan solo un suspiro de esa muñequita me alivian todo mal gracias a Dios, ya que estos días han sido emocionalmente duros para mí. Me he enfrentado a una cantidad de emociones encontradas por los grandes cambios que he experimentado con mi maternidad. En primer lugar en cuanto a lo social, siempre fui una mujer que entablaba nuevas relaciones y mantenía mi propio círculo de amistades, pero desde mi embarazo este aspecto de mi vida cambió del cielo a la tierra, teniendo en cuenta que ninguno de mis amigos tiene bebés. Así que esto terminó por dejarme de cierta manera aislada debido a que mis prioridades cambian y para personas que no saben lo que esto significa o no les interesa compartirlo simplemente no se vuelven a asomar ni por las curvas.


Otro de los aspectos a tener en cuenta es mi vida a nivel profesional, ya que me siento dividida en dos. Una parte de mi desea seguir viéndome progresar de acuerdo como lo venía soñando desde hace un tiempo y al estar desde hace más de un año en cese de actividades ha provocado en mi cierta frustración. Pero por otro lado siento que me entristece la idea de dejar de ver los avances de mi hija, de perderme tantas cosas y miedo por creer que tal vez si me dedicara a retomar mi carrera, el lazo que estoy forjando con mi bebé algún día se rompa por la poca frecuencia con que la vería. Pero al mismo tiempo me pregunto cómo hacen las madres que continúan en este aspecto de sus vidas, cómo compaginan el tiempo de su trabajo con el tiempo de sus hijos. ¿Si les alcanzará?, ¿se puede lograr mantener el amor de nuestros hijos sin descuidar nuestros logros profesionales?


A parte, un día me levanté de la cama a eso de las 4:00 a.m. que es la hora que se levanta mi beba y mientras me dirigía a preparar el tete me miro al espejo y me doy cuenta que tan lejos estoy de la mujer que era antes de tener a mi bebé. Cielos! Cuantas cosas han cambiado en mi! Será que podré algún día reconocerme? Por que definitivamente en cuanto mi aspecto físico creo que requiero más tiempo del que cuento para lograr verme como antes. Por que entre las labores diarias en mi hogar y el cuidado que requiere mi beba es bastante difícil, no tomar la ropa más cómoda (que me quede) y no hacerme cualquier peinado raro que permita mantenerme el cabello lejos de la cara implicaría dedicarme un tiempo que siento no poseo, por que lo que queda del día se lo debo a mi descanso. Así que mi moral no está en lo muy alto que digamos.


Al principio creí que sufría de depresión postparto, pero por lo que he leído no estoy tan grave, si he llorado, he tenido ganas de no hacer nada, he renegado de la vida que me ha tocado, pero como mencioné unas líneas arriba, ver a mi beba es lo que me conforta a continuar adelante. Espero esto sólo sea una fase, espero pueda en algún momento acomodar los tiempos y tomar práctica en el asunto de la maternidad y definir que es lo que más deseo y como manejar las cosas de tal manera pueda dedicar tiempo para mi hija, mi hogar y por supuesto para mí.